El futbol mexicano está deseoso de figuras, los extranjeros no rinden y los jóvenes nacidos en nuestro país se dan de a poco. Cuando uno destaca algunos se dedican a inflarlo y otros tantos a tratar de poncharlo. Lainez, Marcel, Alexis Vega, Víctor Guzmán y otros tantos futbolistas que habitan la gitana Liga MX.
Pero el que hoy nos tiene aquí es Víctor Guzmán, un futbolista que a pesar de sus 23 años ha tenido un largo recorrido en el futbol mexicano. Fue rechazado por el Atlas, se formó en la cantera de Chivas y terminó a préstamo en Pachuca.
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En ese momento el Rebaño pujó por Orbelín Pineda que también tenía grandes condiciones. Y ahí Pachuca aprovechó y compró al Pocho. A la par Orbe se volvió figura en Guadalajara y Víctor tomó consistencia con los Tuzos. El resto es historia.
Víctor brilló en las recientes semanas y hoy llegó a un momento cumbre cuando ante Necaxa, en la Jornada 15 de la Liga MX, marcó cuatro goles que lo colocaron en un selecto grupo de goleadores mexicanos que presumen póker de anotaciones en un encuentro: Layún y Chuletita Orozco son los más recientes. El primero los hizo en la Jornada 10 del Apertura 2014 cuando las Águilas visitaron a Santos. El partido quedó 1-4. El segundo los hizo en la final de ida del Clausura 2015, cuando los Guerreros le ganaron 5-0 a Querétaro.
Pero la excelsa actuación de hoy ante los Rayos, solo es un premio al gran futbol que Víctor ha desarrollado, motivo por el cual en Chivas están interesados en repatriarlo para fortalecer al equipo de cara a 2019. Aunque hay algunos motivos que impedirían que se volviera a vestir de rayas: su precio, el rechazó en el pasado y su deseo de jugar en el extranjero.
Así que el Rebaño tendrá que buscar en otro lado, ya que el Pocho no está interesado en regresar y con ese nivel tiene toda la razón. Porque si algo motiva a los jóvenes que militan en Pachuca es la oportunidad que reciben de poder emigrar al futbol europeo y la prueba está en sus más recientes “envíos” a Holanda: Erick Gutiérrez y Chucky Lozano.
