Después de una semana alucinante para la Selección Nacional y la afición, luego del triunfo ante Alemania, el sábado 23 de junio llego el segundo partido para México en el Mundial de Rusia 2018. Un partido que abrió la segunda jornada del Grupo F en el Rostov Arena y que significaba, para el Tri, la posibilidad de ser el primer clasificado a octavos de final.
Las emociones explotaron aun antes de que empezara a correr el balón, en un estadio, una vez más, repleto de mexicanos que cantaron a todo pulmón el Himno Nacional Mexicano, uno de los máximos símbolos de identidad y mexicanidad. Una inyección de energía para el conjunto tricolor.
El partido inició en punto de las 10 am con un claro dominio del balón por parte del equipo mexicano, y con Corea, como se esperaba, agrupado en defensa con un 4-4-2 que apostó a golpear de contra.
Pasados los veinte minutos del encuentro, el central surcoreano Jang Hyunsoo se tiró a tapar un centro con el brazo en alto, y el balón le pegó de lleno. Un error de novato que le regaló a México la oportunidad de avanzar en el marcador. Se marcó el penal dentro del área y Carlos Vela fue el encargado de cobrarlo. Lo hizo de manera perfecta. Vela besó el escudo mexicano, luego de anotar el 1-0. Su festejo, una clara dedicatoria a su abuelo, recién fallecido.
Al medio tiempo, México estaba por delante merecidamente. Habían mostrado personalidad en el campo, aunque pudieron anotar más goles a través de Layún y Lozano. Aunque el primer tiempo fue claramente dominado por México, Corea pudo encontrar los caminos para complicar al Tri.
Al inicio de la segunda mitad México siguió presionando, al minuto 66 cayó el segundo gol de México. El primero de Chicharito en este Mundial. El atacante capitalizó un contragolpe; enganchó adentro del área y definió de manera espectacular. Un gol con el que el Chucky le regresó el favor a Chicharito, por el tanto ante Alemania. Los mismos protagonistas, roles invertidos: Lozano asistió a Hernández quien, con un freno magnífico en el área, mandó el balón al fondo de la red.
Con este gol, Chicharito empató como máximo goleador en la historia de los Mundiales a Luis Hernández “El Matador” (con 4).
Con el marcador 2-0 Osorio echó mano de la banca y le dio minutos a algunos jugadores. Rafa Márquez entró por Guardado, Gio por Vela y Tecatito por Hirving Lozano.
México continuo con la presión. Pero en un descuido en el tiempo agregado (90+3) cayó el gol de Corea en una portería que había permanecido invicta hasta ese momento, resguardada por Memo Ochoa. Con un imparable remate de Heungmin Son, quien estuvo buscando el gol durante todo el juego. Un gran gol que por suerte no cayó antes y no le alcanzó a Corea.
El partido finalizó 2-1 con un amplio dominio del equipo mexicano, que tiene un pie en la siguiente ronda, con dos partidos ganados, y 6 puntos en la tabla; lo que los deja en este momento, como el primer lugar de Grupo F.
La afición estuvo a la altura, no solo no vociferó el grito prohibido, además despidió a los jugadores con el Cielito Lindo. Otra vez los hicieron sentir en casa, ¡Ganó México!
