Francia muestra su grandeza y ya está en la final de Rusia 2018

La llamada “final adelantada” de este Mundial entre las selecciones de Francia y Bélgica tuvo como escenario el Estadio Krestovski, en la ciudad de San Petersburgo.

La primera semifinal tenía como protagonistas, por un lado, al equipo más goleador de la Copa del Mundo; con 14 tantos en cinco partidos, por otro al gran favorito, no solo para llevarse el triunfo de este duelo, sino para alzar la Copa.

El partido comenzó con Mbappé demostrando porqué no se deja de hablar de él desde que comenzó el mundial, y los primeros minutos de posesión para Francia. Pero en cuando perdieron el balón, Bélgica se alzó y nos mostró porqué estaba jugando una semifinal, la precisión en los pases entre los belgas era simplemente sublime.

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Antes de los quince minutos, Bélgica ya había tenido dos ocasiones claras con Eden Hazard, aunque no pudieron concretarse. Acción tras acción, los De Rode Duivels se volvían más más peligrosos. Las acciones se multiplicaban para los belgas, ante unos franceses incapaces de retomar el control del balón y crear opciones.

Después de varios minutos de ataques y contraataques de ambos equipos se presentó la oportunidad de Francia. Pasado el minuto 30, luego de un centro desde el costado derecho, Giroud, intentó y casi de espaldas, logró cabecear el balón, que estuvo muy cerca de entrar al arco belga. Minutos después Griezmann también tiró desde el borde del área. Esta vez enganchó y disparó con su pierna derecha, pero la pelota se fue por encima del marco que custodia Courtois.

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Bélgica respondió de inmediato, está vez fue Lloris quien se vistió de héroe haciendo una gran tapada ante el remate de Alderweireld. Minuto 40, ambos equipos estaban en igualdad de posibilidades, los remates a portería iban de un lado a otro. Cuando llegó la gran oportunidad para Francia; luego de un gran pase de Mbappé, Pavard quedó en un mano a mano con Courtois, era el gol, sin embargo el portero logró impedir el gol, desviando el balón con la pierna.

Terminó el primer tiempo con un empate a ceros. Pero no a falta de oportunidades, sino de esa pizca de suerte que a veces hace falta. La calidad y el nivel del juego era sencillamente superior a lo antes visto; sin pelotas paradas, sin faltas innecesarias, futbol en su estado más puro. Brillaban las habilidades técnicas y la precisión en los pases.

El equipo belga encontró mejores oportunidades en la primera media hora del juego. Era un partido de mucha intensidad, con un extraordinario nivel. Fue una estupenda primera mitad para Eden Hazard en la ofensiva belga.

Era un partido imperdible, a pesar de la falta de goles. Francia y Bélgica tuvieron buenos momentos, pero ni Olivier Giroud ni Romelu Lukaku, hombres determinantes para sus equipos, tocaron el balón durante el primer tiempo.

Apenas 6 minutos después de iniciado el segundo tiempo, cayó el gol de Francia. Un tiro de esquina cobrado por Griezmann al que Samuel Umtiti se anticipó para anotar de cabeza. Así lo ganaba Francia 1-0.

Bélgica se descontroló por completo luego del gol en contra. La defensa se desarmó y Giroud apareció con un remate de peligro que logro detener Courtois. Luego hubo otra llegada de Tolisso que también pudo desviar el portero de Bélgica. Thibaut Courtois fue el hombre del partido para los Diablos Rojos, sus atajadas los salvaron de un marcador mucho más abultado.