Pelea por no descender, no hay inversión, su dueño está inmerso en temas políticos y se le achacan demandas de abuso sexual a jugadores de las categorías inferiores. Si hay un equipo oscuro, lleno de misterio por su propio dueño es el Club Veracruz. El Clausura 2019 de la Liga Bancomer MX ya tiene al peor equipo y gracias al reglamento podrá continuar en la Primera División con un pago de 120 millones de pesos.
Los Tiburones Rojos han tenido un mal torneo, necesitan de un milagro para no terminar en el último lugar de la tabla porcentual, la buena noticia para su dueño es que no hay descenso y que podrá seguir en la Liga con un pago. Desde que el equipo volvió a aparecer en la Primera División ha peleado por no descender, juega por la permanencia y da más pena que gloria.
Algunos de los temas que se le achacan son: falta de pagos, maltrato a los miembros del club, agresión a miembros de la FMF, violencia en las gradas, falta de jugadores, abuso sexual, equipo relacionado con la política y hasta agresión a la Comisión de Árbitros.
Son temas que se han ventilado, se sabe que su dueño Fidel Kuri Grajales utilizó el equipo de futbol para hacer propaganda política para ganar la elección como diputado local. Después, amenazó con llevarse el equipo de la entidad sino votaban por el PRI en las elecciones para gobernador del estado de Veracruz en 2017. ¿Quieren más? Bueno, este mismo señor agredió fisicamente al presidente de la comisión de arbitraje, esto esta grabado.
¿Qué aporta el equipo al futbol mexicano? La respuesta es clara: nada. No ha sido protagonista del torneo, no produce jugadores de calidad y tan solo el portero Sebastián Jurado ha sido convocado a la Selección Mexicana. Es de los clubes que prefiere contratar extranjeros. Los Tiburones se han convertido en una franquicia que utiliza a su afición, se dice ser un equipo que representa a la ciudad, pero ¿esto es la ciudad?
La ciudad requiere de un equipo competitivo, no que solo llene los estadios cuando van los equipos grandes. Solo vive de una Copa MX y la verdad es que es mejor que desaparezca la esencia del señor Kuri de Veracruz y del futbol mexicano. Los Tiburones representan la mediocridad y descaro del balompié.