Los ecos del Mundial de Rusia 2018 se siguen sintiendo a seis meses de haberse coronado Francia como campeona del Mundo. Tite, el entrenador de la Selección Nacional de Brasil, reveló que Fernandinho, mediocampista del Manchester City, dejó la canarinha por las amenazas que recibió después de la justa mundialista.
En entrevista para Sport TV, Tite reveló que Fernandinho declinó el llamado con Brasil porque le había prometido a su familia que no volvería a jugar para la selección.
“El primer jugador que tuve ganas de convocar después del Mundial fue Fernandinho. El primero, el número uno. Es un jugador extraordinario”, narró Tite para después defender al centrocampista, quien estuvo presente en la derrota 7-1 del Mundial 2014 ante Alemania y quien hizo el único gol de Brasil frente Bélgica, que culminó con la eliminación del Scratch en Rusia 2018, en cuartos de final. “¡La pelota entra de casualidad también! ¡En circunstancias entra a favor, y otras en contra también!”, dijo el entrenador.
Fernandinho y Neymar en Rusia 2018 (Imagen: Getty)
“Yo estuve en contacto con él. Sé que tuvo algunos inconvenientes por esa cruda realidad con su familia. Él me dijo que le prometió a su familia que no volvería a jugar”, abundó Tite sobre su conversación con Fernandinho, sobre la situación que les tocó atravesar junto con sus seres queridos, ya que fueron el blanco de una serie de ataques en las redes sociales.
“Fui a hablar personalmente con él porque la selección brasileña tiene mucho orgullo de tener un jugador con esa dignidad y competencia profesional. No soy burro para convocar un jugador malo. Ojalá que tenga luz, voy a apoyarle mucho”, concluyó Tite sobre la situación actual de Fernandinho.
Fernandinho en acción con el Manchester City (Imagen: Getty)
El seleccionador de Brasil hizo un paralelismo entre Fernandinho y Moacir Barbosa Nascimento, el arquero de la selección brasileña al que los aficionados nunca le perdonaron el fallo en el segundo gol que provocó la derrota frente a Uruguay en el Mundial de 1950. El arquero por querer adelantarse, pensando que Alcides Ghiggia iba a centrar, así que se posicionó en medio de la portería. Quiso reaccionar, cuando se dio cuenta que Ghiggia no iba a centrar, sino a disparar. Alcanzó a arañar la pelota, pero su precipitación evitó que lograra la atajada. Ese gol condeno a Brasil y lo convirtió en un chivo expiatorio de la derrota.
Es por eso que Tite espera que la situación del futbolista del Manchester City no llegue a esos extremos y pueda regresar con la selección.
