Las pruebas de fuerza han dado inicio en los Juegos Olímpicos y en el lanzamiento de martillo se ha presenciado historia, en las manos de Anita Wlodarczyk.
La vigente campeona mundial de Beijing 2015, rebasó el récord olímpico en el segundo lance, al registrar una marca de 80.40 metros, pero aún faltaba lo mejor.
Para su tercer lanzamiento, el martillo tocó tierra después de 82.29 metros y superó la marca mundial por 1.21 metros más, récord que fue impuesto por ella el año anterior. Wlodarczyk, además, subió a lo más alto del podio dejando con la medalla de plata a la china Wenxiu Zhang y en el tercer lugar a la británica Sophie Hitchon.