En el más reciente encuentro que disputaron el AZ Alkmaar y el Twente dentro de la Eredivisie, Peet Bijen perdió el zapato y terminó en la tribuna en posesión de un aficiona del AZ.
Así es, la ley de Murphy en toda su expresión: “Si algo puede salir mal, entonces saldrá mal”. El joven central no esperaba que su tenis se saliera de su lugar y mucho menos que terminara en la tribuna. Al final tuvo que negociar con el aficionado y el zapato fue devuelto.
El Twente perdió el encuentro 0-2 y probablemente el resultado no tuvo tanta relevancia como el hurto del zapato.